Finanzas Corporativas
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AUTOR:IMEF CDMX
Los precios de transferencia se refieren a los precios de los bienes y servicios que se intercambian entre empresas bajo un control común (partes relacionadas), es decir, si una empresa subsidiaria vende bienes o presta servicios a su holding o empresa hermana, el precio cobrado se denomina precio de transferencia.
El objetivo principal de estos precios es determinar de manera real las ganancias sometidas a impuesto de partes relacionadas que, por su carácter internacional, operan en diferentes países, procurando evitar que se evadan impuestos que deberían pagarse en México.
Por lo tanto, las autoridades aduaneras buscarán evitar que las empresas deduzcan sus gastos en nuestro país, mientras trasladan sus ganancias de manera artificial a países con menores tasas de impuestos.
Para que se lleve a cabo un precio de transferencia se deben cumplir dos condiciones:
1. Una empresa participa directa o indirectamente en la gestión, el control o el capital de la otra.
2. Ambas empresas pertenecen al mismo grupo o conglomerado, por lo que la misma persona participa directa o indirectamente en la gestión, control o capital de ambas empresas.
Las regulaciones de precios de transferencia utilizan un concepto llamado ‘precio de plena competencia’, que es el estándar aceptado internacionalmente que las empresas multinacionales y la administración tributaria deben aplicar con fines fiscales.
¿Para qué sirve?
Los precios de transferencia buscan que las operaciones celebradas entre vinculados o partes relacionadas cumplan con el principio de plena competencia, el cual, para efectos fiscales, señala la obligación de las empresas de tratar como entes separados a sus vinculados.
Además, podemos decir que sirve para:
Proteger la base gravable en las transacciones efectuadas entre partes relacionadas y evitar la manipulación de operaciones, por ejemplo, llevarse las utilidades a los países con una menor tasa impositiva.
Establecer procedimientos a través de los cuales se pueda verificar la realidad de las operaciones, así como emplear metodologías que permitan verificar la adecuada asignación del precio a las operaciones.
Otro elemento importante es la fiscalización de las operaciones realizadas con empresas ubicadas en jurisdicciones donde hay una baja o nula imposición y regímenes tributarios preferenciales, como paraísos fiscales.
Valoración en la aduana
Las autoridades fiscales y las autoridades aduaneras suelen tener diferentes objetivos al evaluar el valor de los bienes comercializados entre partes relacionadas. Si bien las autoridades fiscales buscan asegurarse de que el valor de la mercancía objeto de transacción no sea excesivo y comparable al de partes no relacionadas, la aduana busca encontrar una manera de evaluar con precisión el monto de los derechos de aduana a pagar.
La regulación de precios de transferencia en México es un tema meramente fiscal en el Impuesto Sobre la Renta (ISR). No obstante, la fijación de precios en operaciones entre las partes relacionadas sirve a la aduana para determinar el valor de la transacción de las mercancías importadas.
Ya sea que sea una pequeña y mediana empresa o una operación a gran escala, los precios de transferencia pueden presentar problemas de impuestos internacionales. Por eso es vital revisar tu estrategia de precios de transferencia para tratar de mitigar los riesgos crediticios y de mercado, mientras cumples con las regulaciones locales y globales.
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