Cómo invertir en desarrollo sustentable y crecimiento económico en México

La protección del medio ambiente es una cuestión básica cuando se habla de energías renovables, pero a nivel productivo también tiene un papel cada vez más importante. Esa es otra de las razones por las que, tanto desde el sector energético como desde el productivo, los esfuerzos por implantar y generalizar el uso de energías renovables no deben detenerse.

Las energías renovables en los procesos productivos tienen un impacto altamente positivo debido a que el costo de obtención de la energía cada vez es menor. Si se reducen los costos de producción, la competitividad aumenta y, con ella, las ganancias y el empleo, sin dejar de lado que los consumidores también salen ganando.

Mario Correa, vicepresidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del IMEF, señala que estamos viendo cambios en la agenda pública del mundo y en Estados Unidos es muy claro el giro que se está dando hacia energías limpias, abundantes, confiables y baratas. Para las empresas estadounidenses es muy importante que los procesos productivos se realicen con energías limpias, porque una empresa que no pueda confirmar que sus procesos de producción se realizan con energías verdes no será bien vista por los consumidores.

Por el contrario, Mario Correa comenta que en México los temas de política energética lamentablemente van en sentido contrario al mundo, no solo en utilizar energías limpias (ya que en México estamos regresando a los combustibles fósiles) sino que también en tener una energía que sea confiable y a precios competitivos.

“Lamentablemente las empresas del Estado no producen energía limpia, ni abundante, ni a precios competitivos, ni confiables porque no se tiene la infraestructura, ni la inversión, y no se tiene porque el Estado no ha tenido los recursos”, dice.

Hace unos años se empezaba a abrir la puerta al sector privado y ahora el país va en sentido contrario, advierte Correa, además de que la estrategia de desarrollo que está tratando de implementar la actual administración preocupa al sector energético y eso no abona a la inversión que podría venir.

“Es una oportunidad que estamos dejando de aprovechar para realmente generar progreso, desarrollo y prosperidad en el país”, apunta. 

Productividad y presión internacional

Para Federico Rubli Kaiser, vicepresidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del IMEF, la parte fundamental de las energías renovables para el crecimiento económico es que bajan costos, entonces al bajar costos la productividad se incrementa y todo esto favorece al crecimiento. 

Opina que un problema serio que ha tenido México en las últimas décadas ha sido una ausencia  del crecimiento razonable de la productividad, entonces con las energías limpias se fomenta un menor costo y con ello una mejoría en la productividad.

“Hay presión internacional muy importante para adoptar este tipo de energías limpias porque están convencidos que puede mejorar la productividad y el crecimiento, entonces esto es algo que pudiera cambiar la actitud anti energía renovable que tiene este gobierno. Espero que los presione para pensar esto”, agrega. 

Federico Rubli Kaiser comenta que del comunicado conjunto que surgió de la reunión pasada del presidente Andrés Manuel López Obrador con el presidente estadounidense Joe Biden, claramente se ve que los párrafos referentes a las energías renovables los redactaron los estadounidenses y se los impusieron en el acuerdo a los mexicanos. 

“En un párrafo dice que los presidentes acordaron trabajar juntos para tener energías más limpias y renovables, ya ahí le dijeron vamos juntos en esto y todavía peor lo comprometió a asistir a las cumbre de medio ambiente”.

La presión internacional puede ser muy importante y obviamente puede favorecer al país porque “obligaría” en cierto sentido al gobierno actual a cambiar de actitud. Otra cuestión importante es que estos temas están contenidos en el T-MEC, convirtiendo al tratado en una palanca que ayude  a México a dar un impulso a las energías limpias. 

No podemos dejar fuera de las consideraciones que además de ayudar a disminuir la contaminación, también su costo está muy por debajo de las energías convencionales, por lo que los beneficios tanto para empresas como consumidores serán muy notables.

En el IMEF sabemos que existe una relación directa desde la energía sustentable hacia el crecimiento económico, por lo que nos lleva a concluir que esta variable es de suma importancia para que exista mayor crecimiento económico. Hoy en día muchos países desarrollados están invirtiendo cada vez más en este tipo de energías limpias y México no puede quedarse fuera de la tendencia global.