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AUTOR:IMEF CDMX
Actualmente en el mundo no existe una definición acordada internacionalmente de lo que es una pequeña, mediana o gran empresa. Diferentes regiones o incluso diferentes países utilizan distintos criterios para medir el tamaño del negocio.
De acuerdo con el INEGI, en México se consideran microempresas a las que tienen de 0 a 10 empleados, pequeñas a las que tienen entre 11 y 50, medianas a las que tienen entre 51 y 250, y grandes a las que tienen más de 250 personas; por nivel de ventas anuales las microempresas reportan hasta 4 millones de pesos, las pequeñas hasta 100 millones de pesos y las medianas hasta 250 millones de pesos.
Debido a los diferentes tamaños, sectores, industrias y características particulares de cada empresa, sus objetivos a mediano y largo plazo son muy distintos. Medir el crecimiento del negocio y compararlo con otro de igual o diferente tamaño será un reto difícil de lograr, sin embargo, hay elementos y métricas que se pueden utilizar para medir el éxito de los negocios.
Por supuesto, lo más importante a considerar y la forma más obvia de medir el crecimiento empresarial, independientemente del tamaño, es la rentabilidad. Al final del día, el objetivo principal de cualquier negocio es ganar dinero, sin embargo, aquí exploraremos otras opciones.
Las pequeñas empresas tendrán ingresos por ventas mucho más bajos porque tienen menos productos disponibles para la venta y menos clientes. Las grandes empresas obtendrán ganancias mucho mayores por la venta de productos. Además, cuanto más grande sea el mercado al que sirve una empresa, es probable que obtenga más ingresos.
El uso de los ingresos por ventas como una medida comercial es una buena manera de comparar dos o más empresas involucradas en la realización de la misma actividad comercial, por ejemplo, dos fabricantes de telas. Esto porque ambos producen el mismo tipo de producto en la misma etapa de producción.
No así comparar empresas en dos industrias diferentes por ejemplo, productores de trigo y panaderías, en donde no funciona del todo bien porque están utilizando diferentes métodos de producción.
Las empresas grandes suelen emplear a muchos más empleados que las empresas pequeñas en la misma industria, por ejemplo, una tienda de conveniencia local y un gran supermercado.
Sin embargo, dos empresas pueden contratar un número diferente de empleados, pero aún así tener el mismo nivel de producción o uno similar, por lo que esta clasificación puede ser engañosa. Por otro lado, un negocio puede usar más maquinaria que el otro y requerirá muchos menos trabajadores que la que utiliza métodos tradicionales.
Cuanto mayor sea la participación del mercado total, mayor será la empresa en comparación con otras empresas en la misma industria, en cambio, si la participación de mercado es menor, la empresa será más pequeña en comparación con otros negocios en su industria.
Esta métrica es un buen indicador de crecimiento para las empresas.
El capital necesario para la inversión a largo plazo se utiliza para un negocio con el fin de producir bienes y prestar servicios a los clientes, por ejemplo, terrenos, locales, maquinaria, equipos y herramientas.
Un aumento en el valor del capital empleado sugeriría que el negocio está creciendo: la empresa está usando más dinero para inversiones a largo plazo.
Existen varios métodos para medir el crecimiento de las empresas y son muy específicos en cada industria, por esta razón es muy importante establecer las métricas que se van a observar para saber si se están cumpliendo los objetivos.
Fuente:
https://visaempresarial.com/pe-bcp/noticias/como-se-mide-el-crecimiento-empresarial_1553
https://www.forbes.com/sites/mikekappel/2017/03/08/6-ways-to-measure-small-business-success/
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